25/11/2024

Desde el Colegio Oficial de la Educación Social de Castilla-La Mancha, nos dirigimos a nuestra región con dolor, indignación y determinación por los 82 feminicidios en 2024, por las1.559 mujeres asesinadas por hombres desde el año 2010, por las 14 violaciones y las 55 agresiones sexuales denunciadas al día en España, (Ministerio del Interior, 2024).

A estas desoladoras cifras se suman un 57,9% de mujeres, entre 18 y 35 años, que concertaron citas a través de aplicaciones y se sintieron presionadas para mantener relaciones sexuales, que casi un 30% de estas mujeres, afirmó que, a pesar de haber manifestado dolor físico y deseo de parar, el hombre continuó y un 21% de las mujeres fue forzada a mantener una relación sexual con violencia (Federación de Mujeres Jóvenes, 2023).

Estas devastadoras cifras son una muestra de que la violencia hacia las mujeres sigue siendo una lacra insostenible y que requiere una respuesta coordinada, contundente, integral y urgente.

Una Realidad Insoportable. Cada uno de estos números son vidas cercenadas. Una vida que ya está mutilada por la violencia y la sinrazón. El impacto de la violencia machista va más allá de las propias víctimas y sus familiares, impactan en la comunidad difíciles de cicatrizar. La Educación Social no quiere callar ante esta tragedia. Es necesario afrontarla, las cifras anteriores no son meros números, son el reflejo de un problema estructural que alimenta la desigualdad, la discriminación y la violencia. El resultado de una sociedad que todavía sigue tolerando, minimizando, justificando e incluso negando la violencia hacia las mujeres bajo actitudes machistas, estereotipos, negaciones o silencio.

Medidas y Leyes Eficaces. La Educación Social exige medidas y leyes que protejan a las víctimas. La burocracia, la falta de recursos o posicionamientos de algunas partes de la sociedad siguen siendo obstáculos para la protección de las víctimas (mujeres y sus familiares) que se encuentran en riesgo. Es necesario que se aplique la ley de forma estricta en todos los casos. La violencia contras las mujeres debe ser una prioridad de todas las administraciones, con recursos y medidas, con eficacia y eficiencia. Las órdenes de protección se deben cumplir, y ningún agresor puede quebrantarla. Los fallos no se contemplan, cada error afecta a la seguridad física y emocional de las víctimas.

Apoyo y Prevención. Se requieren programas que permitan salidas reales a estas mujeres. La Educación Social juega un papel relevante en la detección, acompañamiento y protección, pero se necesitan mayores apoyos, nuevas herramientas, mejores recursos, todo ello para reconstruir vidas. No queremos hacerlo solas, queremos equipos interdisciplinares. La sensibilización debe llegar a toda la sociedad, que pueda desafiar actitudes y comportamientos arraigados que vienen perpetuando la violencia y la desigualdad, desde la infancia, entendiendo el respeto y la igualdad, y el rechazo a cualquier tipo de violencia.

La Educación Social quiere romper el ciclo de la violencia. Estamos y estaremos con las supervivientes, dando el apoyo que necesitan, en la primera línea de acción, escuchando y educando, ofreciendo el acompañamiento que requieran. No desistiremos en la sensibilización y en la exigencia, es un desafío social que afecta a la sociedad en su conjunto. Cada persona bajo su responsabilidad debe asumir el compromiso de acabar con esta violencia. El silencio no es válido, el compromiso activo es la respuesta válida única.

Este Colegio, en su vigésimo aniversario, quiere reafirmar su compromiso en la lucha contra la violencia hacia las mujeres. Trabajaremos incansablemente con las supervivientes y sus familias, además para lograr políticas eficaces y efectivas, y también para construir una sociedad justa e igualitaria. La violencia contra las mujeres no tiene cabida en nuestro presente ni en nuestro futuro en Castilla- La Mancha.

Manifiesto.